miércoles, 25 de enero de 2023

Goethe juega con las nubes

Johann Wolfgang von Goethe, el tremendo escritor alemán, mayormente conocido por su Fausto que escribió entre 1808 y 1832, se interesó por el estudio de las nubes allá por 1786 cuando escribió su  Viaje a Italiadiario dedicado a Charlotte von Stein a quien el también dibujante y pintor amó con locura y  le escribió más de 1700 cartas. Las nubes en esta obra son elementos recurrentes pues no sólo enmarcan las descripciones de las ciudades italianas, sino también eran  indicativos de fortuna o desesperanza. 

   Luego su interés creció más cuando en 1815 el poeta leyó On the Modification of Clouds, del gran farmacéutico inglés Luke Howard, considerado un referente muy importante en los estudios de meteorología y el primer científico en categorizar las nubes. Inspirado en esta obra en 1821 Goethe contrató a los pintores Friedrich Preller y Wilhelm Wesselhöft y realizó un registr de las distintas categorías de las nubes, así en 1825 se publica Versuch einer Witterungslehre (El juego de las nubes). Dejo aquí los poemas que Goethe escribió en ese tiempo, luego de mirar con insistencia el firmamento.

martes, 10 de enero de 2023

Vladimir Mayakovski: una nube en pantalones

Caricature against the Constituent Assembly, 1921.


¡Abajo tu amor! ¡Abajo tu arte! 

¡Abajo tu sistema! !Abajo tu religión!


Vladimir Mayakovski, el llamado poeta de la joven revolución soviética, firmó junto a otros poetas, en 1912, Bofetada al gusto del público, un manifiesto vanguardista donde propugnaron por una poesía de la velocidad, de la urbanidad, del dinamismo en contra de un arte pasivo establecido por el realismo ruso que debía ser sustituido por la modernidad, con una visión futurista. 

    Así el también artista visual, dramaturgo, actor de cine y partidario de Lenin,  viajó a diversos países de Europa y América, aprendió de la cultura de estos  mientras repartía propaganda bolchevique que él mismo hacía.  Estuvo, por ejemplo, en México por 1926, donde fincó gran amistad con Diego Rivera, o en Cuba, país que le conmovió profundamente  y del cual escribió el famoso poema Black and White que inspiró un cortometraje en 1932, mismo que podrás observar si le das clic al afiche de arriba, dibujado por Mayakovski. 

    "El gigante" decidió concluir con su vida de un balazo en el corazón en 1939, a la edad de 37 años. Su vida fue como un rojo nimbo, brillante, decidida y fugaz.

    Dejamos acá Una nube en pantalones, tetráptico futurista escrito en 1914 y que pasó por varias censuras debido a las "groserías" del poema hasta 1918. El poeta en 1930 lo recordaba: 

    Eso (Una nube en pantalones),  sería originalmente "El Decimotercer apóstol". Cuando mostré la pieza, la censuraron, me dijeron: ¿Tienes algo con el trabajo duro?, y yo les dije que eso no me interesaba en absoluto. Luego tacharon 6 páginas y el título y me dijeron: ¿Podrías no escribir tantas groserías?  Y yo respondí: Bueno, si es lo que deseas lo haré, si quieres, como un loco, seré implacablemente tierno, no un hombre, sino una nube en pantalones...     

 

Borís Pasternak (2º por la izda.), Serguéi Eisenstein (3º por la izda.), Lilia Brik (4ª por la dcha.), Vladímir Mayakovski (3º por la dcha.), 1924


martes, 3 de enero de 2023

Emily Dickinson piensa en el vuelo de la nube


Emily Dickinson es una esencial poeta norteamericana del Siglo XX. Escribió sobre la Muerte, Dios, el Amor, de la frágil y brusca Naturaleza, del Engaño o el Sueño a lo largo de más de mil poemas de los cuales tan solo publicó una docena, hoy se conocen sus textos debido a la insistencia de su hermana Livina, quien logró publicar los cuadernillos de Emily luego de su muerte a causa del Brigth. Era fina, elegante, sabia, arriesgada en su escritura, mejor dicho, vanguardista. Gustaba, a veces, de pasear en su jardín donde perdía su mirada en las flores que mucho y profundamente le interesaron, la Universidad de Harvard recopila su Herbarium. En los últimos años de su vida se la pasó vestida de blanco, como si nube fuera, y desde ese mínimo universo escribió: 

 

 

194

 

On this long storm the Rainbow rose

On this late Morn —the Sun­—

The clouds — like listless Elephants —

Horizons — straggled down —

 

The Birds rose smiling, in their nests —

The gales —indeed— were done —

Alas, how heedless were the eyes —

On whom the summer shone!

 

The quiet nonchalance of death —

No Daybreak - can best—

The slow —Archangles’s syllabales

Must awaken her!

 

194

 

En esta interminable tormenta el Arco Iris emerge—

En esta tardía Mañana   —el Sol—

Las nubes — como apáticos Elefantes —

Horizontes —se retardan—


Los Pájaros sonrientes, de sus nidos se levantan—

Las ventiscas —desde luego— también—

Ay, cuan descuidados los ojos—

¡Sobre los que brillaba el verano!

 

La muerte silenciosa e indiferente—

No amanece– puede ser mejor—

Lento —silabario de Arcángeles

¡Debe despertarla!


 

Gabriela Mistral: nube de tul

G abriela Mistral fue como una nube, viajaba de un lado a otro, se estacionaba en la cordillera de los Andes o miraba las sombras amoratadas...